OBLIGACION MORAL: Salto Grande debe reconocimiento a Jorge Andrade Ambrosoni

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El día miércoles 22 de noviembre de 1988, el parlamento nacional rinde homenaje  al extinto legislador nacional  Don   Jorge Andrade Ambrosoni .

En esa oportunidad Leonardo Vinci  diputado por Salto en su intervención,  para honrar la memoria de Andrade  solicita colocar  su nombre en la sala de máquinas en  la represa de Salto Grande.

Al finalizar su exposición Leonardo Vinci manifestó “quiero reiterar algo que ya he expresado en alguna oportunidad, integrando otro órgano: que esa sala de máquinas de la margen izquierda, como se dice en Salto Grande, tiene que llevar el nombre de este republicano, de este demócrata ejemplar, esta persona que tanta falta ha hecho al parlamento y cuya desaparición ha significado, sin dudas, unas de las más grandes pérdidas que ha padecido la Republica en el correr de estos últimos tiempos” señaló.

Fuente: diario de sesiones cámara de representantes tomo 637 números 2032 al 2039 nov/1988.

Carlos Albisu  actual delegado uruguayo ante la Comisión Tecnica Mixta de Sallto Grande,  en su primera reunión realizo el mismo planteamiento ante las demás autoridades de la represa, parece mentira,   veintiocho años después  del planteo parlamentario.

Jorge Eladio Andrade  actuó y se desbordó en la acción partidaria.

Treinta y cinco años atrás predijo la crisis energética que habría de ocurrir en el país; y propuso para enfrentarla la construcción de la represa de Salto Grande.

Prof. Gerardo Giudice amigo de Andrade dice “Llegó a ser el secretario de la Comisión Pro Represa de Salto Grande. Pero en la práctica, es sabido fue mucho más que el secretario. Fue el motor humano que la hizo funcionar. No escatimó esfuerzos de ninguna naturaleza. Encabezó una columna de más de cinco mil salteños y en la Plaza Libertad pronunció un memorable discurso llamando a la integración de Uruguay y Argentina para la realización conjunta de la represa. Insólitamente, hoy, ni siquiera una turbina lleva su nombre”.

El día de su despedida final, Salto todo se vio movilizado. Su enorme figura congregó a personalidades de las más variadas ideologías. En el cementerio, la más emotiva exposición correspondió a Eduardo Jaurena.

En un pasaje expresó: “(…) Me unieron a él, más de cuarenta años de lucha fraternal. En el transcurso de este largo recorrido a veces atravesamos horas de alegría, y otras, las más, de tristeza e inclusive, de desgarramiento cuando la fractura interna de nuestro partido hizo que él y yo nos alineáramos junto al fundador del socialismo uruguayo

PR.

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