Álvaro Vero-Esp.en Salud Pública, Ad.Hospitalaria-Internista-
“Salud demorada es justicia negada” fue la frase significativa del ex Director y Presidente de OPS Sir George Alleyne , nombrado Caballero por la Reina Isabel II de Inglaterra en reconocimiento a sus servicios en medicina.- Fue coincidente con la primera gran intervención del Banco Mundial a favor de invertir en salud (1993) que apuntó a los ministros de finanzas.
Hoy el país se rehace de la situación a corregir en la materia, que comenzó a merecer reajustes mucho antes de la pandemia, que lamentablemente tuvo entre sus costos ocultos la saturación de la sociedad con mensajes cotidianos en exceso, casi siempre fotografías del día anterior y la dificultad de acceso a los diagnósticos y tratamientos, hasta suspensiones de los mismos, y que hoy esperan soluciones estructurales,de procesos,y las innovaciones que son necesarias ; no se puede esperar más, es hoy, no se puede esperar el “despertar” de nuevos programas públicos y privados, se estará pagando con más vidas.-
Podemos decir con certeza que los grandes perjudicados fueron los enfermos, y la sociedad en su conjunto en la economía, junto a los profesionales y equipos que la lucharon, muchas veces sin medidas de seguridad aconsejadas, al pie del enfermo y con la angustia consecuente.
El gremio médico del interior además de las demandas históricas ensayadas nada aportó desde el punto de vista epidemiológico ni de un posible seguro (debió hacerlo) para sus agremiados en caso de fallecimientos.
Tampoco el Colegio Médico actuó de acuerdo a sus nobles propósitos, reduciéndose a reparto de mascarillas y recomendaciones para los incumplimientos de aglomeraciones proponiendo en ese caso pintores o cortadores de césped para los hospitales. Triste ,y no es casualidad que 4 listas disputen la próxima elección con reformas estructurales.-
Femi y el CM deberían hacerse cargo y asumir sus omisiones.La renovación se impone.
Tampoco debemos olvidar la incapacidad de las Direcciones de salud departamentales con sus “ buenos augurios” de que estaban haciendo las cosas tan bien que no habría pandemia en salto ¡¡ y la lenta iniciación y equívoca ,de la vacunación. En fin, el “diario del lunes” también nos dice que clínicas, sanatorios, SRL, Anónimas de la salud, siguieron cobrando pese a los servicios menguados y restringidos.
Hoy enfrentamos otras “olas”; la de mutaciones virales posibles, las enfermedades crónicas no transmisibles, las cirugías largamente postergadas de cuyo futuro aún no se sabe más que la voluntad ministerial, pero nada de los actores para llevarlo a cabo, el centralismo cada vez más notorio de ASSE por carencia de líderes capaces en el interior, y la ola para la que no existe vacuna que es la extensa caducidad de la ética médica en los niveles jerárquicos departamentales y el silencio cómplice de quienes los escudan como políticos locales.
No debe sorprender encargados de la ética golpeadores, dirigentes importantes acosadores laborales y también acosos de todo tipo desde la jerarquías máximas, inútiles complacientes, confundidos/as con quimeras de rebeliones tras el dinero, y empresarios hacendados que dando malos servicios sacan un plus para sus haciendas. ¿Y la salud de la gente? A esos se les debe exigir un código de conducta especial orientado hacia el servicio e independiente de retribución e intereses personales. Se debe auspiciar la renovación orientada y respaldada y que una auditoría ponga las cosas en su lugar atento a leyes ignoradas.
Pero es hoy, con la urgencia debida, la enfermedad no espera.- Demócrito (S.VI aC) decía “Los hombres esperan la salud de los Dioses; ellos no saben que son autores y dueños de su propia salud “