El reclamo es “sano, puro y genuino”, pero se ha querido “enchastrar”, dijo a ECOS. Este miércoles se realizaron las pericias psiquiátricas.
El peón rural Hugo Leites y el capataz de la estancia Flor de Ceibo, que fue denunciado por presuntas lesiones y omisión de asistencia, se realizaron este miércoles las pericias psiquiátricas y psicológicas dispuestas por el juez de la causa. Estos informes se anexarán al expediente, que ya contiene también la historia clínica solicitada para demostrar la fractura de costilla que sufrió el trabajador y el lunes sumará los resultados de la reconstrucción.
Leites, el capataz y el estanciero, que fue denunciado por presuntas amenazas y omisión de asistencia, estarán presentes en el lugar donde presuntamente ocurrió la golpiza sufrida por el trabajador a manos de su superior inmediato. Allí, los representantes de la Justicia los interrogarán para corroborar las distintas versiones de lo sucedido.
Gabriel Cartagena, abogado del trabajador, aseguró a ECOS que ni a él ni a su cliente les preocupa lo que pueda surgir en materia penal. “Los que tienen que estar preocupados son los denunciados, Hugo es la víctima”, sostuvo, y aseguró que contrariamente a lo que se dijo por parte de los abogados de las otras dos partes “no hubo ninguna contradicción en sus declaraciones”.
“Hugo no ha tenido contradicciones en ningún momento, ni cuando me habló en el escritorio, ni cuando hizo la denuncia policial, ni al ratificarla en el juzgado de Villa Constitución, ni cuando estuvo tres horas declarando en el juzgado de Salto. En lo que hay contradicciones es entre la versión de Hugo y la del capataz, pero eso es natural”, explicó Cartagena.
Asimismo, enfatizó en que “está probado por médicos que las lesiones que tuvo Hugo en la espalda fueron provocadas por el capataz” y que ahora “es la Justicia la que tiene que determinar la responsabilidad de cada uno según los delitos denunciados”.
Lo que sí le preocupa a Cartagena es lo laboral. Desde el 18 de setiembre, cuando ocurrieron los hechos denunciados, Leites está sin trabajo y sin cobrar la liquidación. El abogado ya presentó la liquidación ante el Ministerio de Trabajo y el lunes habrá audiencia de conciliación. “La empresa puede llevar una oferta para resolver el tema o decir que no está de acuerdo con la liquidación que presentamos y se abrirá la vía judicial”, dijo el abogado.
La cifra reclamada es de $ 895.000 y comprende, según explicó Cartagena a ECOS, el despido, el aguinaldo, salario vacacional y licencia por el período trabajado y el equivalente a 1.284 horas extras. Además, se incluye un 10% que corresponde de multa por ley 18.572 y el 50% por daños y perjuicios, que es el máximo que permite la ley 10.449. Este porcentaje lo fijará luego el juez.
Cartagena defendió la cifra de las críticas que han recibido en estos días, sobre todo en redes sociales. “Hay gente que divide esto entre los meses que trabajó Hugo y piensa que ese es el sueldo, y nada que ver. Se intentó enchastrar el reclamo sano, puro y genuino por sus heridas, lesiones y por el despido”, sostuvo.
“Pero nosotros no pensamos en lo económico, pensamos en la dignidad humana de Hugo”, enfatizó el abogado.
Por otra parte, Cartagena aseguró que el informe realizado por la Inspección General de Trabajo en la estancia Flor de Ceibo condice con lo denunciado por Leites. Allí, según informó a ECOS el titular de esa repartición, Gerardo Rey, se constataron irregularidades en lo relacionado “al salario y la seguridad social” y a “la salud y la seguridad laboral”.
Este miércoles, el ministro de Trabajo, Ernesto Murro, se comunicó telefónicamente con el intendente de Salto, Andrés Lima, para pedirle que ayude a Leites a conseguir un empleo.